La controversia en torno al retraso de Subnautica 2 ha escalado dramáticamente, con el editor Krafton lanzando un fuerte ataque en la batalla en curso con el antiguo liderazgo de Unknown Worlds. En una declaración pública inusualmente dura, Krafton culpó explícitamente a los fundadores del estudio Charlie Cleveland y Max McGuire por el retraso del juego, acusándolos de descuidar sus funciones en favor de proyectos personales.
Un conflicto de liderazgo con millones en juego
La impactante declaración de Krafton revela acusaciones explosivas contra los creadores originales de Subnautica. El editor afirma que instó repetidamente a Cleveland y McGuire a reenfocarse en Subnautica 2 tras el fracaso de Moonbreaker, pero supuestamente Cleveland priorizó su proyecto cinematográfico personal. Lo que hace estas acusaciones especialmente graves es su momento: llegan meses antes de que se activara un pago de bonificación masivo de $250 millones vinculado a objetivos de ingresos.
La declaración pinta un cuadro de caos en el liderazgo, afirmando Krafton que la ausencia de los exdirectores generó "confusión reiterada en la dirección" que descarriló el desarrollo. Lo que debía ser un lanzamiento en acceso anticipado a principios de 2024 ahora se ha retrasado hasta 2026, con Krafton insistiendo en que la versión actual carece de contenido suficiente.
La estructura de bonos genera indignación
Quizás lo más controvertido es que Krafton reveló que el 90% del fondo de bonos de $250 millones estaba destinado a solo tres ejecutivos: Cleveland, McGuire y el ex CEO Ted Gill. Esta revelación ha provocado indignación entre el personal restante y los fanáticos, especialmente después de informes de que los desarrolladores de base esperaban bonificaciones que cambiarían sus vidas y que ahora están en peligro.
La situación se volvió fea cuando los fanáticos organizaron boicots en redes sociales después de que Bloomberg informara que la reestructuración de liderazgo de Krafton ocurrió sospechosamente cerca de la fecha de pago de bonos. Krafton sostiene que el retraso se debe únicamente a comentarios de probadores, pero muchos no creen esa explicación.
Ahora, con el ex CEO de Striking Distance Steve Papoutsis al mando, el estudio enfrenta una batalla cuesta arriba para recuperar la confianza. El comentario público de Cleveland sobre una "picadura" sugiere que los creadores destituidos podrían tener más que decir, preparando el escenario para más revelaciones mientras este drama corporativo continúa desarrollándose.